Existe una expresión poderosa que dice, “Dios aprieta pero no ahorca” lo que significa que cada adversidad, desamor y fracaso conlleva el potencial de darnos un beneficio para ayudarnos a
Mi Camino Hacia la Sanación & Crecimiento Espiritual
Existe una expresión poderosa que dice, “Dios aprieta pero no ahorca” lo que significa que cada adversidad, desamor y fracaso conlleva el potencial de darnos un beneficio para ayudarnos a
Escuché al predicador, Joel Osteen decir el otro día que Dios nos encuentra al nivel de nuestras expectativas. Sí, hay poder en nuestras expectativas. Cuando uno espera lo bueno,
“La intención es el punto de partida de cada sueño” – Deepak Chopra Nunca olvidaré hace 5 años la mirada de admiración y determinación que tenía mi hija menor cuando
“Aceptar no significa resignación, significa comprender que las cosas son como son y que tiene que haber una forma de superarlo” – Michael J. Fox ¿Qué dirías si te dijera
¿Alguna vez te has sentido perdida literal o figurativamente? Si es así, no estás sola. ¿Recuerdas, hace 20 o 25 años, cómo era llegar a una destinación desconocida antes de
¿Sabes cual es tu destino? Amas lo que haces? ¿Conoces tu propósito? Creo que cada uno de nosotros nace con un regalo especial para compartir con el mundo. Algunas personas
¿Eres culpable de mirarte en el espejo y de no gustarte lo que ves? ¿Alguna vez has deseado parecerte o ser alguien diferente de ti mismo? ¡Yo sí! No una,
“La forma en que elegimos ver el mundo, crea el mundo que vemos” – Barry Neil Kaufman ¿Has tenido alguna vez uno de esos días en los que nada te
Soy madre de dos hijas hermosas y hermana de tres barones menores, y se bien que esto no me califica como experta en niños, pero me siento animada a compartir
¿Qué pensarías si te dijera que hay una manera de obtener, aumentar y de hacer durar tu nivel de felicidad? Desde el momento en que nacemos, la felicidad es algo
¿Sabes quién eres? Me refiero al verdadero tú, no el que crees que eres, no el que la gente te ha dicho que eres, ni tampoco el que la sociedad
Ayer llevé a mi hija a uno de sus restaurantes favoritos para cenar. Cuando nos sentamos en nuestra mesa, ella se inclinó hacia mí y me susurró al oído: “Mami,